martes, 16 de octubre de 2012

Marinero perdido


Un ángel dormido despertó del océano.

Una ola lo regreso con desesperación de olvidar.

Un granito de arena le encontró otra alternativa.

Dónde esta el fracaso del marinero y la   pasión de las gaviotas?

Dónde  el amor decidió ahogarse ?

Espejo de mentiras


Envuelta  de apariencias, fantasía de existir,  desenvuelve la realidad.

Bellas tristezas quiero su cruel aroma de sabiduría.

Siento temor de no llorar tanto al reír poco.  

Mi piel  es tan vana como la idea que encierra tu verdad.

Vacio mas alla



Inexplicablemente, agoniza la belleza  de los segundos  sin colores.
Hay formas sin momentos,    detrás de la idea.

jueves, 11 de octubre de 2012

El encantador de toros


El domador hacedor de su propio ego desechó algo esencial, es más fiel el animal a sus instintos que el hombre a sus convicciones.

Yo creo en los toros de ojos azules, pero no en el domador  que encanta al animal hasta hacerlo sucumbir a su instinto de supervivencia.
No me resulta fácil ni permisivo intentar calmar la furia.
Me pregunto de cuantas maneras posibles se puede enfrentar al toro sin una  espada 80 cm de longitud?.

Solo un encantador muy confiado puede creer de verdad que el toro de ojos azules siempre se quedaría sentando  a espera de su última orden.  Resulto que el toro fue más sensato y de más corazón que su Opresor, un educado y coqueto encantador de animales salvajes. El toro pudiendo quitarle la vida, se permitió burlarse de él.

A diario nos encontramos con domadores que subestiman la fuerza y el instinto de supervivencia de los oprimidos. No comprende que hasta el más salvaje de los animales es capaz de copiar un acto repetitivo y monótono, al final la magia sale de la galera, y aunque eso no suceda, los pasos se vuelven previsibles. Entonces el experto domador de salvajes sumisos cae en cuenta que se aprovecho de la situación más de lo conveniente,  lo peor para él fue la máxima confianza en sí mismo, casi ignorante de aplicar siempre las mismas reglas,  y por sobre todo la  poca desconfianza hacia el brutal  animal. Lo subestimó, no lo desafío. El toro tiene corazón, instinto y supervivencia. Además de coraje para ir al hoguera. 
  
De nada sirve cambiar la naturaleza de alguien porque buena o mala le es propia.

Sucede en casi todos los ambientes y situaciones donde la mayoría acepta un papel, una regla y un escenario; mientras de la vereda de enfrente, el otro acecha con la ilusión de que ningún actor descubra que no hay razón para fingir que el encantador no tienen ninguna virtud para tenerlos a todos haciendo el esfuerzo de contener su furia, reprimiendo los deseos, avasallando las esperanzas, agotando las fuerzas y rompiendo los esquemas.
Esta historia se desarrollo  en un lugar bajo un modelo de poder, donde hay un  grupo o ciertos individuos que creen tener el toro  domado.
En el momento que brota la furia  el  señor encantador corre por el campo intentando salvarse del aguerrido animal. Si tengo que elegir  quien soy me quedo con mi parte más salvaje, ya que ese instinto demoledor me garantizo sobrevivir a los cobardes. No es fácil enfrentarse a un toro hambriento, menos aún si el domador es un inexperto.  Nada bueno hay en un lugar donde quedan rastros de polvo en las manos. El inexperto creyó que podría con la bestia como con los demás. Se adentro al ruedo y a viva voz de los integrantes comenzó a estudiarlo, no se adelantaba ni se acercaba, solo lo miraba. Un toro sabio no revela su estrategia de ataque, se puso de cola y bajo los cuernos. Y mientras el señor aguardaba tranquilo, él se paseaba como si estuviera solo, así como fumando un puro. El torero no  terminaba de decidirse si era pertinente y conveniente acercarse o esperar. A medida que  los minutos pasaban el Sr se impaciento por suponer quedar como un imbécil. Seguramente pensó, como es que un toro no ataca? De a poco todo ese espectáculo del domador de toros encantado fue desapareciendo. El Sr, comenzó a buscar la manera de enfurecerlo, pero nada resultaba. Primero, se acerco y se alejo, luego arremolino su capa, como nada acontecía, decidió subir la apuesta y comenzó a burlarse del toro manso. Un toro de ojos azules. Cuando vio que  todo continuaba igual el Sr decidió informarle al público que el animal, se había dado por vencido y entonces comenzó a avivar. Y mientras algunos se quejaban y otros se retiraban burlándose o quejándose, el Sr se distrajo, y en ese momento el toro dio un espectáculo solo para dos.   Demostró que, el encantador lejos de ser  muy inexperto era en realidad un engreído, porque esta vez, el animal se paro frente a él y sin que mediara un solo respiro incrusto sus cuernos entre sus pies. No lo quiso matar, levanto al hombre sobre su lomo y comenzó a  pasearlo por el campo, esta vez sí avivando a todos los presentes por el toro.
El espectador pudo ver un Sr acostumbrado al mandato social de lo que es. Un animal peligroso a sabiendas de la intención de quien lo acecha. En este caso particular, no había una situación de riesgo de muerte del animal, solo que este último ya estaba muerto.
Cuando salió al ruedo, su premisa era sentarse a esperar que el torero se acercara sin más. Su instinto, su gen, su esencia y toda su potencia se libero de la codicia y la sumisión. El Sr del espectáculo, se llenaba los bolsillos con poca cosa, porque no arriesgaba nada, el animal no  iba a atropellarlo, pero él iba ser aplaudido.
 Surgió el imprevisto, el toro tomo su papel de indomable y salió a relucir su fuerza, solo que, lo hizo de manera aleccionadora para el Sr que impaciente esperaba que el toro hiciera su parte domestica del espectáculo.  De esta experiencia, el toro aprendió a exigir que se lo respeten como tal hasta su muerte; mientras que  el encantador resulto ser más animal que  la fiera. Este torero fue acorralado por su presa y maltratado psicológicamente.

 A cada encantador algun dia le llega su toro de ojos azules.....

martes, 9 de octubre de 2012

Cinco naipes

Acá estoy un día más sentada delante de la computadora, apuntando al centro del reloj para dar en el blanco y detenerlo de una vez.
Creo que me equivoque de profesión, pero nadie se dio cuenta, solo mi mal humor. 
Nadie puede sentir mejor que yo lo que es el aburrimiento a sueldo. Llegue hasta acá como por un empujón, viento a favor, en contra, da igual.  
En estos momentos solo pienso en mi nena. Cualquier sacrificio es posible y vale la pena intentarlo. La recompensa es volver a casa y esperar la hora en que ella regrese con la abuela.
 Me agota pero es un cansancio entrañable. Porque todo el día se consume en ese tiempo de amor.  
La miro cuando duerme de costado con la cabecita asomada por arriba de la manta. Siento ganas de sentarme a su lado y darle muchos besos. Cuando lo hago, comienza a reírse. Intenta hacerse la dormida, pensando que tal vez yo deje de darle mimos. Después me mira entrecortado y me abraza. No sé cuanto duran esos momentos, pero estoy segura que en algún lugar de su corazón se quedará graba para siempre la sensación de bienestar.  Todos debemos tener un rincón de caricias de mamá guardadas. Debe existir alguna forma de traerlas al presente como el aroma del café. 
En ese momento ella,  me dice, mami no quiero levantarme. Me está pidiendo que la suba en mis brazos  para llevarla a desayunar,  como cuando era bebe, ahora como una princesita.
Hay que vivir sus pequeños días porque cada año se aleja con sus zapatitos de cristal.
Cuando me absorbe la rutina  y comienzo a percibir el vacío rememoro su  aroma. Es lo único por lo que me permito sufrir, llorar, reír, sentir.
No imagino un tiempo en el vacio de aguantar tanta pavada si no fuera por su amor. Para mí no sirve nada, todo viene en un molde apretado.
Lo terrible de esta forma de existencia es que somos dos individuos distintos que un día van a tener que separarse. Solo espero que ese puerto quede lejos, y  para entonces la vida me dé una oportunidad de quererla nuevamente, la que me quito. Porque en este escenario de hoy el único significado de la palabra mamá es la bendición de tener a Sofía desparramando papelitos por su cuarto, gritando desaforadamente todo el tiempo, desafiando cada palabra que le digo, manchando su ropa de chocolate, corriendo porque no quiere bañarse, rompiendo el peine, pintando la puerta, sonriendo todo el tiempo en su mágico castillo de 5 naipes, frágiles y ostentosos. Ella se asoma por una de las ventanas que da al lago y de ahí me llama vestida de perla.  Mágico, desordenado, casi sucio pero su cuarto es un palacio donde hay brillo, música, doncellas, príncipes, magos, madrastras, malvadas, dragones, solo es ella en su habitación jugando que está en su  cuento. 
En que lugar se me olvidaron mis cartas, se perdieron los vestidos, desaparecieron los principes  ?
Cuando el cuento doblo la hoja y comenzo la realidad?.

viernes, 5 de octubre de 2012

El país ciclotímico



Este es el país donde las maravillas se pueden encontrar perdidas y Alicia se queda sin historia.



Ni siquiera logro diferenciar mi sombra. Somos muchos transitando el mismo y diferente camino; a veces los siento tan próximos que sus almas me atraviesan.

Es imposible aburrirte, todo se convierte en noticias.  Te adormeces y al despertar todo cambio. Lo que hace unos instantes estaba permitido deja de estarlo y nada de lo pasado tiene valor. Desaparecen los pensamientos, las imágenes, los sonidos y si algo prevalece solo es parecido a lo que era.



Hace un tiempo visité a una persona que vivía en una calle de nombre cualquiera, pero cuando quise regresar no encontraba el sitio. Equivoque el plano o el camino; sucedió que mientras me alejaba, estaban modificando su nombre, imposible imaginarlo. Nadie tiene respuesta de lo que acontece. Aceptan el desafió de lo imprevisto sin cuestionar y sin recompensas.



Los héroes son tantos. Los niños comienzan estudiando un hecho que siempre es distinto. Debe ser difícil construir una conciencia, si apenas es posible recordar. Cuenta historias que nunca terminan, aunque prefieren intelectualizarlo como un final abierto. En definitiva, creo que sucede siempre lo mismo en diferente orden y así seguirá por siempre. Es difícil salir de un círculo en espiral, para ello es necesario tener cierta certeza del centro.



Las personas por televisión le hablan al consciente colectivo persuadiéndolo, emocionándolo, recitando valores y deberes. Es increíble suponer que eso también se les transformo y no logran encontrarlo.



Este es el país de las ultimas cosas, porque duran eternamente solo el segundo en que son alcanzadas. Parece que ese instante les justifica el amor, el odio, el silencio y la vida. Agudizo mi ingenio tratando de resolver el enigma, porque entre lo que se pierde existe algo que nunca agota su energía, ellos la reconocen en cualquier frase, en una lagrima, en las hojas del otoño, en lo simple y hasta en lo imposible. Así se genera el principio de todo aquello que nunca cesara, porque siempre tendrán la inquietud de recobrar lo que perdieron por justicia, por honor, por desidia.

 

Entrada destacada

Locura en gotas de leche

No aceptaba la verdad, porque el vientre es todo. No aceptaba que la encerraron en su cuarto con los miedos del abandono. Luchaba con su...