martes, 23 de octubre de 2012

Monedas plateadas

Dedicado a aquellos con quienes en algún momento compartimos nuestros días en el colegio secundario.
Hoy no están. Algunos no eran amigos, pero estaban sonriéndome;  otros en cambio se llevaron un pedacito de mi a otro lugar. Para el Mono, Laly, la Polaca, Demito, Rey, La colorada, Víctor, y el mas joven que no recuerdo su nombre. Desde acá los abrazo.


Muerte, que me impacientes,
No existes en mi mente.
Muerte, que me destruyas,
Desde mi cuerpo hasta mi alma,
Y permitas que me de cuenta  de la calma.
Hace atrás unos años,
Hace poco en el tiempo,
cuando todos fuimos deseo,
poco a poco nos hundimos en un abismo.
Cuando pienso que entre esto y aquello existe el instante, sé que he desperdiciado demasiado.
Hoy mis labios besan los suspiro que sus manos frías en mi cuerpo han mirado.

Entrada destacada

Locura en gotas de leche

No aceptaba la verdad, porque el vientre es todo. No aceptaba que la encerraron en su cuarto con los miedos del abandono. Luchaba con su...